A orillas del
Rin se encuentra
Colonia (
Köln, en alemán), una ciudad que tiene a sus espaldas dos milenios de historia. Cada año acuden más de 100 millones de visitantes. El principal reclamo turístico es su famosa catedral pero no faltan otros atractivos de primer nivel para justificar la visita.
La imponente
Catedral de Colonia terminó de construirse en 1880. Sus dos torres impresionan, la torre norte de 157,38 cm es siete centímetros más alta que la torre sur. Tiene capacidad para más de 20.000 fieles.
En su interior se conservan las reliquias de los Tres Reyes Magos que el arzobispo
Reinaldo de Dassel había robado en
Milán como botín de guerra. El
Relicario de los Tres Reyes Magos es una magnífica obra de orfebrería medieval de 300 kilogramos de peso. En su interior, además de los magos de Oriente se conservan los patrones de la ciudad de
Colonia y las reliquias de varios santos. En los 2,20 metros de longitud de la urna hay sitio para mucho.
En 2007 el artista
Gerhard Richter realizó una moderna vidriera de más de 100 m
2 con cientos de cuadrados de color. No es la única vidriera moderna, en alguna incluso encontramos motivos astronómicos.
Justo al lado de la catedral encontramos la
Estación Central.
Además de la catedral son interesantes otras doce iglesias románicas repartidas por la ciudad. La
iglesia de San Gereón con su curiosa cúpula en forma de decágono.
La iglesia de
Groß San Martin llama la atención por su notable torre y su escueta decoración.
El origen de su nombre se remonta a los romanos. En el año 50 d.C. fundaron la "Colonia" en la que residirían los gobernadores imperiales de Roma. Todavía quedan numerosos restos de la colonia romana, entre ellas la
Torre Romana y la
Puerta Norte Romana.
La ciudad también tiene fama internacional por la colonia. En 1709
Johann María Farina creó la marca de perfume más antigua del mundo y la llamó
Eau de Cologne. En la
Casa Farina se puede visitar el museo del perfume y comprar la colonia original.
En la ciudad hay varios museos muy interesantes. Los amantes del arte moderno no pueden pasar por alto el
Museo Ludwig, una de las principales colecciones de arte moderno del viejo continente.
Además de obras de los grandes maestros americanos del expresionismo abstracto o del pop art, encontramos una obra hiperrealista de
Duane Hanson que muchos visitantes confunden con otro visitante.
El
Museo Wallraf-Richartz es el museo de arte más importante de Renania del Norte-Westfalia. Cuenta con obras maestras desde
Rubens a
Rembrandt, además de una interesante muestra del artista local
Stefan Lochner.
El
Museo Romano-Germano reúne una importante colección de piezas arqueológicas de origen romano.
La torre del ayuntamiento está decorada con figuras de personajes relevantes de la ciudad y tiene un carrillón musical.
Junto al
Rin hay un bonito paseo fluvial para pasear en bicicleta o tomar una
kölsch la cerveza local que se sirve en vasos de 200 cc, algo nunca visto en Alemania donde la cerveza estándar es de medio litro.